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Práctica

La Luna en conjunción con el ojo de Tauro

La estrella gigante roja Aldebarán poco antes de quedar  ocultada por la Luna el 31 de diciembre de 2017. Stellarium La estrella gigante roja Aldebarán poco antes de quedar ocultada por la Luna el 31 de diciembre de 2017. Stellarium

Observación de ocultaciones lunares de estrellas

La Luna orbita alrededor de la Tierra en poco más de 27 días. Durante este tiempo, nuestro satélite parece moverse cada día un buen palmo en dirección este por el cielo. En ese proceso a veces cubra algunas estrellas brillantes. A finales de año, el 31 de diciembre, se da el caso: Aldebarán desaparece detrás de la Luna.

La ocultación del 23 de enero de 2018 se produjo al atardecer con la Luna en fase media. Stellarium La ocultación del 23 de enero de 2018 se produjo al atardecer con la Luna en fase media. Stellarium

En principio, cada noche la Luna cubre en realidad muchas estrellas más débiles, porque están muy profundas en el cielo y la Luna, con un tamaño aparente de 0,5°, parece relativamente grande. Sin embargo, la ocultación de estrellas más brillantes es menos habitual y un emocionante acontecimiento celeste que merece la pena observar.

Afortunadamente, hay varias estrellas brillantes en la zona por la que transcurre la órbita lunar: Régulo en la constelación de Leo, Espiga en la constelación de Virgo, Antares en la constelación de Escorpio y Aldebarán en la constelación de Tauro. Estas cuatro estrellas de primera magnitud están lo suficientemente cerca de la eclíptica como para que la Luna las cubra de vez en cuando. Pero estas ocultaciones no se producen todos los meses, ya que nuestro satélite no sigue exactamente la misma trayectoria en cada órbita. Las series de ocultaciones siempre van seguidas de pausas más largas. Las ocultaciones se repiten a una cadencia de 18,6 años.

Y de repente no está

Debido a su gran distancia, las estrellas no aparecen planas en el cielo como los planetas, sino como fuentes de luz puntiformes. Por eso, la estrella oculta desaparece de repente en una fracción de segundo tras el borde oriental de la Luna que se aproxima y reaparece con la misma celeridad por el lado opuesto. Visualmente resulta especialmente impresionante la desaparición o aparición de la estrella en el borde de la Luna que no está iluminado. Un caso poco frecuente y especialmente interesante es el de las llamadas ocultaciones rasantes, en las que la estrella se desplaza por el borde de la Luna y puede desaparecer y reaparecer varias veces al quedar oculta tras elevaciones en el borde lunar.

Autor: Lambert Spix / Licencia: Oculum-Verlag GmbH