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Práctica

M13, el cúmulo de Hércules

Muy luminoso y fácil de encontrar: este clásico ejemplo de cúmulo globular también está al alcance de los astrónomos de ciudad.

El cúmulo globular M13 también es un objeto que merece la pena para los observadores de ciudad. Michael Breite, Stefan Heutz y Wolfgang Ries / CCD Guide El cúmulo globular M13 también es un objeto que merece la pena para los observadores de ciudad. Michael Breite, Stefan Heutz y Wolfgang Ries / CCD Guide
Deepsky Stadt Messier 13 Rund

Para los astrónomos de ciudad, de todos los objetos celestes, los cúmulos globulares no son necesariamente los que ofrecen la experiencia de observación más espectacular que se diga. Generalmente se ven como nubes borrosas, siendo sus detalles solamente alcanzables para observadores en campo abierto. Sin embargo, hay algunas excepciones.

Sin ir más lejos, M3 da buena cuenta de la inconmensurable riqueza de estrellas que albergan los cúmulos globulares. Pero aún más interesante es M13, el llamado cúmulo de Hércules, de 5,3 de magnitud, situado en la constelación homónima. Para los astrónomos urbanos este es, sin duda, el objeto más bello de su género.

Nebulosa sin estrellas

La búsqueda de M13 ya no supone ningún problema, ya que está a solo 2,5° al sur de η Her, la estrella de la esquina noroeste del prominente cuadrado de Hércules. Desde allí, basta con girar brevemente hacia el sur hasta que en el campo de visión aparezca un trío de estrellas bastante llamativo, que recuerda a un geotriángulo. A bajos aumentos, la estrella noroccidental pierde su carácter estelar y se transforma en un pequeño disco nebular a tan solo 15 aumentos. Poco cambia la cosa cuando se mira a través de un telescopio de apertura pequeña.

Y eso debió de parecerle a Messier cuando observó el número 13 de su catálogo. El 1 de junio de 1764 anotó lo siguiente: "nebulosa sin estrellas". Sin embargo, no fue el cazador de cometas francés quien descubrió esta nebulosa, sino cincuenta años antes Sir Edmond Halley, el astrónomo inglés que sucedió a John Flamsteed en su cargo como astrónomo real en el Observatorio de Greenwich tras su muerte en 1719.

Clásico objeto de ciudad

M13 cambia mucho a través de las lentes de un objetivo con mayor apertura. En un reflector de 8" a 50 aumentos el cúmulo se ve como una mancha saturada con un halo exterior ligeramente "deshilachado". Mediante observación indirecta puede apreciarse en esta zona una ligera granulación, es decir, la resolución de la nebulosa en puntos de luz individuales. Esto se acentúa a aumentos más altos, de alrededor de 160. Las estrellas situadas al noroeste del cúmulo pueden ayudar con el enfoque: bien enfocados, incluso en el interior del cúmulo parpadean de vez en cuando puntos que reflejan la luz de estrellas individuales. Sin embargo, M13 puede con aumentos aún mayores. Quien firma este artículo ha llegado a alcanzar los 285 y, con un poco de paciencia, se tiene entonces la sensación de haberse sumergido profundamente en el mar de luces del cúmulo, del que se dice que contiene cerca de un millón de estrellas.

Conclusión: M13 es un clásico objeto para observar desde la ciudad. Es fácil de encontrar y brilla tanto que ofrece buenos resultados de observación incluso con telescopios pequeños. Sin embargo, el cúmulo globular solo despliega todo su esplendor a grandes aumentos. M13 es la prueba de que, a veces, los grandes instrumentos a veces también pueden serles útiles a los astrónomos urbanos.

Mapa de M13. J. Scholten Mapa de M13. J. Scholten

Autor: Karl-Peter Julius / Licencia: Oculum-Verlag GmbH